La chica danesa

La chica danesa
Poco a poco el colectivo LGBT ha ido ganado visibilidad dentro las producciones audiovisuales dirigidas al gran público pero, al igual que su posición dentro de las cuatro siglas, el transgénero había sido hasta la fecha el último en ser reivindicado, siendo el gran olvidado y maltratado. Ello no quiere decir que haya una normalidad real en cuanto a la presencia y trato de la homosexualidad en series y películas, pero ya se puede apreciar cierto terreno ganado y hay indicios para esperar con optimismo el futuro.

Siguiendo la tendencia reciente, el cine ha llegado a rebufo de la televisión y ha vuelto a demostrar que está perdiendo, en favor de su hogareña hermana pequeña, su carácter reivindicador. La serie «Transparent» ha conquistado público, crítica y premios, rompiendo con todo los estereotipos y convencionalismos. Luego llegó «Sense8» de los hermanos Wachowski, una apuesta con toques de ciencia ficción en la línea de estos creadores de «The Matrix» donde tienen cabida casi todas las opciones sexuales y de género, producción aparecida tras anunciarse públicamente el cambio de género de uno de los hermanos, ahora Lana Wachowski. Hasta la prensa rosa se ha introducido finalmente en el siglo XXI gracias a Caityl Jenner y la exposición pública de los Kardashian. «La chica danesa» no es la primera película sobre una persona transgénero (a rescatar la amable «Transamérica» de 2005) pero se puede considerar la primera gran producción «mainstream» centrada en una mujer transgénero y lo hace echando la mirada atrás para reivindicar a una de sus primeras figuras.

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Ambientada en los años 30 en Dinamarca y París, el filme se publicita con el mensaje promocional de estar inspirada en una historia real y se presenta como la biografía de Lili Elbe, nacida Einar Wegener, quien fue una de las primeras personas en realizar un cambio de sexo. Solo por su planteamiento, la película abre varios interrogantes sobre lo que puede llegar a considerar aceptable el gran público que desconoce la cuestión y acerca de la necesidad de ficcionalizar para abrir la proyección de la historia. «La chica danesa» se basa en un libro homónimo escrito por David Ebershoff que reinventa la vida de Lili hasta el punto de que la obra solo puede ser considerada una obra de ficción. Ebershoff imagina un universo, la introspección, la motivación de los personajes a partir de datos verídicos pero también crea muchos nuevos personajes y, principalmente, cambia por completo la relación entre Einar y su mujer Gerda. Poco de lo que muestra la película de «La chica danesa» ocurrió realmente tal y como lo cuenta y mucho es una guionización destinada a magnificar ciertas emociones.

La película, siguiendo la novela y no los diarios de Lili publicados con el título «De hombre a mujer» en 1933, narra el proceso de descubrimiento, aceptación y cambio de Einar a Lili y también se centra en el enorme apoyo, fidelidad y comprensión de su mujer Gerda. Ella es presentada com una mujer heterosexual, abierta de mente y entregada a la historia de amor entre ella y Einar. Este romance físico, intelectual y emocional entre ambos personajes es el sustento anímico de la película, el cual permite que el espectador se identifique con el personaje de Gerda y proyecte su empatía hacia la transformación de Lili. En este aspecto, el filme es un estudiado ejercicio de concienciación dirigido a crear un nivel de identificación y de compasión.

la_chica_danesa4Nunca hay que perder de vista que «La chica danesa» sigue las claves del bestseller que adapta y que está destinada al público de los Óscars, dirigida por un ganador de un Óscar, Tom Hooper («El discurso del rey»), protagonizada por otro ganador de un Óscar, Eddie Redmayne («La teoría del todo»), y construida sabiendo tocar todas las teclas de un drama amoroso de época de corte clásico. Magníficamente bien actuada por Redmayne y Alicia Vikander en el papel de Gerda (ambos nominados por sus interpretaciones para los Óscars de 2016), con una cuidada producción y dirigida con sensibilidad y buen ojo, «La chica danesa» es, en cualquier caso, una película bellamente hecha y con una buena historia que mostrar.

La gran pregunta es por qué ha decidido no arriesgarse en contar la verdad y quedarse en terrenos más cómodos. El hecho de que en realidad Einar tuviera casi cincuenta años cuando realizó su cambio de sexo, de que legalmente lograra en los años 30 cambiarse el nombre a Lili Elba, de que Einar y Gerda vivieran en un matrimonio abierto, de que Gerda fuera bisexual, de que hubieran amantes, de que se separaran durante los cambios de Lili, de que Lili adquiriera notoriedad pública por el proceso de cambio que estaba realizando y que, a raíz de ello, el rey de Dinamarca declarara nulo su matrimonio, son elementos verídicos que hubieran transformado la historia narrativa y emocionalmente en una exploración más compleja. Tal vez hubiera sido demasiado para algunos corazones. Pero esta película es otro paso pequeño adelante, esperemos que las cosas sigan cambiando.

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Ficha técnica:
Director: Tom Hooper.
Intérpretes: Eddie Redmayne, Alicia Vikander y Amber Heard.
Año: 2015.
Duración: 119 min.
Idioma: Inglés.
Título original: The Danish Girl.